Sarna de oído: ¿qué hacer?

La sarna del oído, también conocida como otacariosis, es una enfermedad parasitaria frecuente en perros, gatos y hurones. Otodectes cynotis, un ácaro, causa la enfermedad al alimentarse de cerumen y restos de piel en el conducto auditivo del animal. Esta enfermedad altamente contagiosa puede provocar complicaciones graves si no se trata rápidamente.

¿Qué causa esta enfermedad?

La sarna del oído, u otacariosis, está causada por un ácaro, Otodectes cynotis. El ácaro vive y se alimenta en el conducto auditivo del animal. Este parásito microscópico se alimenta de cerumen y restos de piel. Los ácaros se multiplican rápidamente, poniendo huevos en el conducto auditivo, donde las larvas eclosionan y se convierten en adultos en pocas semanas.

Esta enfermedad parasitaria es muy contagiosa y se transmite fácilmente por contacto directo de un animal infestado a otro sano. Los gatos y perros que viven en grupos o comunidades corren especial riesgo, al igual que los animales jóvenes que pueden ser infectados por sus madres. La transmisión también puede producirse por simples encuentros entre animales, por ejemplo durante los paseos o las visitas al veterinario.

El parásito Otodectes cynotis, específico de perros, gatos y hurones, se aloja en el conducto auditivo. Provoca una reacción inflamatoria local. Esta inflamación se debe a la presencia de ácaros que se alimentan de cerumen y restos de piel. Las hembras ponen sus huevos en el conducto auditivo. Las larvas que eclosionan continúan el ciclo de reproducción. De este modo, aumentan la infestación.

Es importante señalar que esta enfermedad también puede afectar a los conejos, aunque el parásito responsable es una especie diferente, Psoroptes cuniculi. Los síntomas y el modo de transmisión siguen siendo similares, por lo que la sarna de las orejas es una enfermedad que preocupa a los propietarios de varias especies de animales.

¿Cuáles son los síntomas de la sarna de las orejas?

Los síntomas de la sarna del oído varían ligeramente entre perros y gatos, aunque pueden observarse ciertos signos comunes en ambas especies.

En los perros

En los perros, la sarna de las orejas se manifiesta en forma de picor intenso. Los perros se rascan con frecuencia las orejas, a menudo hasta el punto de hacerse daño. El interior de la oreja puede enrojecerse e inflamarse, con una producción excesiva de cerumen negruzco y maloliente, rico en parásitos. Al rascarse, el perro puede romper vasos sanguíneos, lo que lleva a la formación de un otohematoma, una acumulación de sangre entre la piel y el cartílago de la oreja, que hace que cuelgue y se hinche.

En los gatos

En los gatos, los síntomas pueden ser más discretos, pero elinterior parduzcode la oreja es característico. Los gatos también se rascan las orejas, sacuden a menudo la cabeza y pueden presentar costras rojizas mezcladas con cerumen. Las otitis pruriginosas causadas por ácaros pueden dañar el oído interno y provocar pérdida de equilibrio y tambaleo.

Los gatos también pueden mostrar signos de picor en otras partes del cuerpo, como la cabeza, el cuello, la base de la cola y la espalda, ya que los parásitos pueden propagarse fuera de los oídos. El cerumen seco y negruzco, similar a los posos del café, y un olor inusual que emana de las orejas son claros indicadores de sarna del oído.

¿Cómo se diagnostica?

El diagnóstico de la sarna del oído requiere una visita al veterinario, que realizará un examen completo de los oídos de su mascota. El veterinario suele utilizar un otoscopio para inspeccionar los conductos auditivos en busca de parásitos, infecciones o cuerpos extraños. Cuando aparezcan signos de sarna, el veterinario tomará una muestra de cerumen para analizar al microscopio la presencia deOtodectes cynotis.

Es crucial diferenciar la sarna del oído de otros tipos de infecciones del oído, causadas por ácaros como sarcoptes, demodex o infecciones bacterianas y fúngicas. El veterinario también puede comprobar la presencia de cuerpos extraños, que podrían ser la causa principal de la infección de oído.

En caso de duda, la muestra de cerumen se analizará al microscopio para confirmar la presencia de parásitos. Este paso garantiza que el tratamiento prescrito será eficaz contra el ácaro Otodectes cynotis. Es importante un tratamiento rápido para evitar complicaciones más graves, como una otitis externa grave, que podría extenderse y dañar el oído interno, causando problemas de equilibrio.

¿Qué tratamientos existen?

El tratamiento de la otitis externa comienza con una limpieza a fondo de los conductos auditivos con productos acaricidas que disuelven el cerumen, seguida de la aplicación de gotas o pomadas antiparasitarias. Los productos acaricidas matan a los parásitos adultos, pero para erradicar completamente la infestación, el tratamiento debe continuarse durante 8 a 10 semanas para cubrir todo el ciclo de reproducción de los ácaros.

Es crucial tratar a todos los animales de la casa al mismo tiempo para evitar la contaminación cruzada. El tratamiento prescrito por el veterinario puede incluir gotas para los oídos, pomadas o soluciones tópicas. El veterinario también enseñará al propietario a limpiar correctamente los oídos para maximizar la eficacia del tratamiento.

Es esencialseguir el programa de tratamiento, aunque los síntomas desaparezcan rápidamente. Un animal aparentemente curado puede seguir siendo portador de parásitos. También es aconsejable tratar ambas orejas, aunque sólo una esté afectada, para evitar futuras infestaciones.

Tras aplicar la crema antiácaros, masajee la base de la oreja para que el producto se extienda uniformemente. La limpieza periódica de los oídos con un producto adecuado, incluso después de la recuperación, ayuda a prevenir las recidivas.

¿Cuáles son las alternativas naturales?

Para quienes prefieren los tratamientos naturales, existen varias opciones para tratar la sarna de las orejas en los animales. Los aceites esenciales y los extractos naturales ofrecen propiedades antiparasitarias y calmantes eficaces.

Los macerados oleosos de Caléndula, Calophylla Inophyla y Hierba de San Juan proporcionan propiedades calmantes inmediatas. Los aceites esenciales de Árbol del Té y Laurel ofrecen potentes efectos antiparasitarios y antiinfecciosos, eliminando eficazmente los ácaros del polvo. El Aspic de Lavanda alivia rápidamente a los animales afectados gracias a sus propiedades antipruriginosas.

El aceite esencial de Clavo es especialmente eficaz contra la sarna. Contiene eugenol, un potente fenol aromático, que mata las larvas de Sarcoptes infiltradas en la epidermis. Sin embargo, es esencial diluir bien este aceite antes de aplicarlo, ya que es dermocáustico.

La plata coloidal es un potente agente antibacteriano, antivírico y antifúngico, útil para tratar heridas y problemas cutáneos en perros y gatos.El hidrosol de lavanda también se utilizapor sus propiedades antiparasitarias y antipruriginosas.

Para una acción antivírica interna, utilice extracto de semilla de pomelo, mientras que el propóleo funciona eficazmente en aplicación oral. Aplique estos tratamientos naturales con cuidado e, idealmente, bajo la supervisión de un veterinario para evitar cualquier reacción adversa. Los aceites esenciales no deben utilizarse en gatos.

¿Qué se puede hacer para prevenir la enfermedad?

La prevención de la sarna de las orejas es esencial para garantizar la salud y el bienestar de sus mascotas. Aunque esta enfermedad no es transmisible a los humanos, es extremadamente contagiosa entre animales.

Revisar regularmente el estado de las orejas de su perro o gato es el primer paso en la prevención. Los propietarios deben estar especialmente atentos tras el contacto con otros animales o después de pasar tiempo en grupo.

También se recomienda el uso regular de antiparasitarios externos, eficaces contra garrapatas y pulgas. Estos productos suelen ser eficaces contra los ácaros responsables de la sarna de las orejas.

Mantener una buena higiene ambiental es crucial. Limpie regularmente los accesorios para dormir de su mascota, como cestas, cojines y mantas. Utilice productos específicos para tratar el entorno contra los parásitos, disponibles en su veterinario.

Si a un animal se le diagnostica sarna de las orejas, es importante tratar a todos los animales de la casa al mismo tiempo para evitar la reinfestación. Aunque los síntomas no sean inmediatamente visibles en todos los animales, la transmisión es posible, y tratar a toda la “manada” garantiza una curación completa y evita la propagación de la enfermedad.