Antioxidantes y vitamina D: claves para reducir los Covid largos
La COVID prolongada afecta a muchas personas mucho después de la fase aguda de la infección. Fatiga, problemas respiratorios o cognitivos, dolor crónico… estos síntomas persistentes tienen un gran impacto en la calidad de vida. Están surgiendo nuevas vías terapéuticas, en particular en torno al papel protector de los antioxidantes y la vitamina D. Gracias a sus efectos antiinflamatorios e inmunomoduladores, podrían ayudar a aliviar los síntomas de la COVID prolongada y favorecer una mejor recuperación. Descubra en este artículo cómo estos aliados naturales podrían marcar la diferencia en las secuelas prolongadas del SRAS-CoV-2.